COLEGIO POMPEI HISTORIA, MISIÓN Y VISIÓN

HISTORIA DEL COLEGIO POMPEI

En los años 60, la Misión Católica Italiana, consciente del elevado auge de inmigración en Venezuela y de las necesidades originadas por este fenómeno, se preocupó de dar atención pastoral a los que dejaron su tierra natal y garantizarles la educación a sus descendientes.

Es así, que en 1962 se funda el Colegio Nuestra Señora de Pompei, en el anexo de una quinta en La Campiña, que funcionaba como Misión e Iglesia. Este pequeño colegio abrió sus puertas en septiembre de ese año, con tan sólo 47 niños que frecuentaban el preescolar y la primaria hasta el 3er grado. Su primer rector fue el padre Ettore Rubin, y su primera directora Sra. Bahílda de Martínez, se esmeraron con amor, alegría y pasión desde un principio para que este proyecto se construyera con una visión de futuro. 

En tan sólo un año la familia Pompei creció muy rápido y el espacio se hizo insuficiente para atender a toda la primaria. Por tal motivo, el Colegio cambia temporalmente su sede a una quinta en Los Jabillos y los sacerdotes se apresuran en adquirir una hermosa mansión en la Urbanización Ávila de la Alta Florida, la cual se convirtió en la sede definitiva del Colegio y en el centro de encuentro de los fieles peregrinos de la Misión Católica Italiana, con la construcción de la Iglesia. Desde el año 1966 hasta nuestros días, Colegio e Iglesia funcionan en una única sede. En ese mismo período se inauguró también el Bachillerato, con la apertura del 1er. año, pero para 1970, el Colegio ya ofrecía todos los niveles, desde preescolar hasta 5º año; bajo la dirección de la Sra. Bahílda de Martínez (Prescolar y Primaria) y la Lic. Luisa Elena Valencia (Bachillerato).

En 1971 egresa la primera promoción de bachilleres en ciencias, 32 jóvenes graduados bajo el lema de la institución amor y luz 

El colegio Pompei es un lugar memorable donde cientos de personas han pasado los mejores años de sus vidas, este es un lugar que sin lugar a dudas un hogar para cada uno de los niños, niñas y adolescentes que pasamos por este. Finalizamos con un agradecimiento a cada uno de los docentes, personal de servicios generales, rectores y directores por su ardua labor por nuestra institución, por brindarnos sus conocimientos, sabidurías y experiencias y llenarnos de valores y principios 

¡ GRACIAS POMPEI !